La importancia del linaje

LA IMPORTANCIA DEL LINAJE. LA TRANSMISIÓN DE CORAZÓN A CORAZÓN.

El primer material teórico para estos seminarios de profundización en el qi gong que vamos a tener en Guadalajara versará sobre la importancia del linaje.

En los textos budistas se suele comenzar con un homenaje a los maestros del linaje y terminar con una dedicación de méritos  dirigida a todos los seres sintientes. Este homenaje se explica porque en las escuelas budistas tántricas se le da una enorme importancia  al vínculo con un maestro que provenga de un linaje ininterrumpido de transmisión que se remonte a Buda, y esto es así en muchas otras tradiciones de conocimiento.

En Beijing, el gran maestro Feng Zhiqiang nos decía un día algo así como (cito de memoria): “Yo realmente no tengo ninguna importancia, solo soy un eslabón en una cadena de conocimiento que se remonta a muchos siglos atrás”.

También nos hablan las tradiciones orientales de la transmisión de corazón a corazón, de espíritu a espíritu.

¿A qué se debe este énfasis en el linaje de transmisión? ¿Por qué es tan importante?

Vamos a intentar responder a estas preguntas utilizando algunas imágenes simbólicas universales.

EL ÁRBOL

arbol

Un árbol cuyas raíces profundas, inmensas, insondables se adentran en lo desconocido, en el supremo misterio,  cada tradición le da un nombre, aquí lo llamaremos el Tao.

De dichas raíces, del Tao, una manifestación, una  emanación de información, de energía forma un tronco, un único tronco.

Algunos le llamarán la tradición unánime, la tradición primordial, simplemente la Tradición , poco nos importa eso.

De este tronco inmenso más allá de la comprensión ordinaria surgen, han surgido y siguen surgiendo ramas, siempre de un maestro de condiciones excepcionales.

En una rama identificamos la tradición hindú, y de esta surgen otras ramas menores,   samkhia,  los Veda,  el yoga,  el vedanta, etc.

En otra rama vemos la tradición budista, de ella surgen como ramas segundarias, hinayana, mahayana, vajrayana y de estas a su vez otra, las escuelas.

Nos importa aquí especialmente otra rama que  es la tradición taoísta. De ella surgen  como ramas principales la astrología china, el feng shui, la medicina tradicional china y los yogas taoístas (nei gong), en esta última rama derivada de la rama de la tradición taoísta surgen la artes marciales internas (xing yi, ba gua, tai ji quan) y los diversos métodos de qi gong taoísta.

Desde cualquier escuela de qi gong tradicional, de linaje auténtico de qi gong uno puede profundizar y remontarse en un movimiento de retorno , y no olvidemos que” el retorno es el movimiento del Tao” como nos dijo Lao Tse, remontar la sabia que nutre nuestra rama hasta llegar a la rama principal de la tradición taoísta, y seguir remontando hasta la tradición universal o unánime y desde este tronco, hasta las raíces insondables.

Pero también puede pasar que decidamos cortar la rama. La vemos hermosa, fuerte, y la separamos del árbol, nos la llevamos a casa. Aún conserva el verdor de sus hojas y la flexibilidad de su madera, pero ya está muerta, aunque no lo sepamos. Queremos plantarla en una maceta, pero lo más probable es que muera, y aun no siendo así, la planta que de ella surja no estará conectada a ese tronco y a esas profundas raíces. Se ha interrumpido el flujo de la savia que recorre todo el árbol.

Esta savia no se ve, circula por el interior de las hojas (cada uno de nosotros), de las pequeñas ramas (los grupos de practicantes), de las ramas más gruesas (las escuelas) y así nos remontaríamos hasta la raíz.

Su efecto está latente en el practicante, y es más evidente a medida que este madura en su práctica no por saber más, sino por saber mejor, mayor comprensión, mayor conexión.

LA RUEDA

rueda

Vamos a utilizar otro símbolo para acercarnos a la idea de la importancia del linaje: la rueda.

Una rueda cuyo centro es el Tao.

Su circunferencia externa es el aspecto más visible de las diferentes escuelas, sus series de ejercicios, sus formas, sus textos, etc.

Hay otras circunferencias más cerca del centro. Allí el conocimiento es más profundo, más transformador.

Y lo será más y más a medida que estas circunferencias se acerquen más al centro. Pero, ¿Cómo llegamos de una circunferencia a otra más profunda?. A través de los radios.

Cada radio de la rueda está conectado al centro, y en su recorrido va pasando por circunferencias cada vez más “profunda”, más cerca del centro. Cada radio es una escuela tradicional, un modo de acercarnos al Tao.

Si en vez de recorrer completamente un radio, con sus dificultades, crisis, momentos de duda o estancamiento,  recorremos una u otra circunferencia, habremos abandonado el camino hacia el centro,  nos hemos apartado del camino de retorno.

 

EL DIAGRAMA DE LA COSMOGONÍA TAOÍSTA

diagrama

 

Este símbolo pudiera no parecer universal en un primer momento, pero esquemas muy parecidos los podemos encontrar en diversas tradiciones (ya los veremos más adelante).

En este diagrama podemos apreciar  como el universo surge por emanación.  Por un impulso que va desde el  wu ji, vacío primordial, a través de la energía universal, manifestando una serie de procesos  que devienen en los “diez mil seres”,  el universo manifiesto , el mundo fenoménico. Si bien el estudio y meditación sobre este diagrama resulta de sumo interés, no es este el momento para ello. Lo utilizamos como símbolo de la importancia del linaje de transmisión.

El camino hacía el Tao, decíamos más arriba, es un camino de retorno, dentro de este esquema,  podemos remontarnos desde el plano de lo visible (los diez mil seres) a planos cada vez más sutiles hasta llegar a la fuente.

Cada escuela tradicional, cada linaje,  propone un itinerario para ese viaje, no siempre fácil. En ese viaje podemos echar un vistazo a otros itinerarios,  incluso podemos ser cristianos y practicar zen, practicantes de yoga y budistas, musulmanes practicantes de un estilo interno taoísta, pero en cada recorrido debemos “conectarnos” con el linaje,  pero cada itinerario debe ser recorrido sin desvíos, so pena de quedarnos en los niveles más superficiales y dificultar el camino de retorno.

CONCLUSIÓN

Desde mi experiencia, un simple practicante y  profesor de qi gong interesado en el estudio de la simbología tradicional, he querido transmitir una convicción, basada no solo en ideas sino en hechos y experiencias.

La conexión con un linaje tradicional, la conexión desde el corazón más allá de los conceptos y elaboraciones mentales tales como me interesa más o menos,  es mejor o es peor que esto o aquello, etc.

Estas  categorías propias de pensamiento conceptual son necesarias para la vida cotidiana pero debe ser dejado de lado en muchas ocasiones por el practicante a medida que se adentra en planos más sutiles Insistimos, una conexión auténtica con un linaje auténtico es el mejor pasaporte para el viaje hacia el Tao.

Linaje, conexión, palabras extrañas para muchos. Es difícil ser un practicante de una escuela tradicional en estos tiempos de urgencia, de satisfacción inmediata, de avalancha de estímulos, de agitación e inquietud en suma. Es difícil, pero es posible para quien así lo sienta de corazón.

LUIS JAVIER DE CRUZ